A mi amiga Pili, le encantan los merengues y desde hace tiempo quería hacerle unos pocos, este fin de semana he encontrado la excusa perfecta.
Pensé ponerles tinte azul solo para que combinaran con los papelitos de magdalenas que tenía, así que primero estiré una masa de hojaldre y con un cortapastas redondo hice los circulitos, los puse en los papelitos y estos en el molde de las magdalenas y los horneé (no demasiado) poniendoles un peso. Mientras tanto, monté seis claras de huevo, y cuando habían subido lo suficiente les puse una pizca de sal, seguí montando y empecé a agregar azúcar glass a cucharadas, concretamente le puse 250 gr. Al mezclarse por completo, le puse unas gotas del tinte azul.
Cuando se había enfriado el hojaldre, llené la manga pastelera y fui poniendo el merengue encima, después lo metí en el horno hasta que se doraron las puntas, y listo.
A Pili le han gustado mucho y eso es lo que importa.
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