MANZANAS DORADAS

  Último lunes del mes: reto de Tía Alia. Y después de unos cuantos meses decantándome por las propuestas saladas, este mes me he tirado en plancha por la dulce sin dudarlo. Primero porque la receta salada ya la tengo publicada en el blog {calamares rellenos, aunque los de Alia son en su tinta} y segundo, porque tratándose de manzanas en postre, siento una debilidad irresistible y me puede la curiosidad {no en vano tengo una etiqueta para las tartas de manzana}

   Este plato es megafácil, y tienes la merienda preparada en 10 minutos. Os cuento.

   PARA 2-3 PERSONAS. Pelamos una manzana y le sacamos todo el centro con un descorazonador. Cortamos en rodajitas {no demasiado finas} y las ponemos en un bol con una mezcla de azúcar y coñac {yo no tenía y le puse vino dulce} Las dejamos macerar un par de horas.

   Ponemos al fuego una sartén con abundante aceite y mientras se calienta, preparamos una mezcla con 3 cucharadas de harina de repostería, una cucharadita de levadura, 3 cucharadas de azúcar, 3 cucharadas de agua y 3 del licor donde estaban macerando las manzanas. Mezclamos bien, hasta que quede con una consistencia espesa como de papilla.

   Vamos bañando las rodajas de manzana una a una y friéndolas en el aceite caliente y después las pasamos a un papel absorbente para quitar el exceso. Las espolvoreamos con azúcar y canela molida y las servimos aún calientes acompañadas de helado  {el mío, de ron con pasas}

  De nuevo gracias a Alia por este recetario y a Carmen por compartirlo con nosotras. Ya continuaremos con este reto después del verano, pero no dejéis de probar estas manzanas.
  Desde luego, acompañado con este helado de ron con pasas es un postre  delicioso,  ¿Con qué helado u otro acompañamiento pensáis vosotros que pega también?